Se instaló hace aproximadamente un año en pleno centro de Tunuyán, y desde entonces –aseguran algunos vecinos – se escuchan ruidos molestos, hay camiones mal estacionados que complican el tránsito, y ratas en las inmediaciones del emprendimiento.
Actualmente el aserradero se encuentra al lado de la escuela José Hernández, en la calle Juan B Justo, entre Irigoyen y Alem. Según un grupo de vecinos del lugar, el trabajo que se realiza en este inmueble es inapropiado para la zona y por lo tanto afecta e impacta negativamente en el vecindario. Lilia Tubert es una de las voceras y se mostró preocupada por las experiencias que –afirma- se viven desde que se instaló.
Según Tubert, los vecinos solicitaron en las áreas de Inspección, Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial que el emprendimiento se reubique en una zona adecuada, o que –si no se traslada- se respete la habilitación que tiene otorgada, que es sólo para la venta de maderas. Han recolectado varias firmas, que además piensan entregar junto a una nota a autoridades provinciales de Ambiente e Industria y Comercio.
Por su parte, el titular del área de Inspección de Tunuyán, Diego Casado, ratificó que en el municipio están al tanto de la situación y explicó que “el lugar aún no tiene una habilitación final”. “Por el momento la comuna le entregó una pre-factibilidad para venta de madera y no como aserradero”, señaló el funcionario anticipando que desde Ambiente y Obras Privadas intimarán a los responsables para que regularicen la actividad, atendiendo a las ordenanzas vigentes y al plan de Ordenamiento Territorial que estipula que los espacios rurales-urbanos deben conformarse armónicamente.