En el distrito de Tupungato, un 16 de junio de 2012, una vecina del lugar invitó a dos bailarinas de danzas españolas, Florencia Suñer y Giuliana Tumbarello, para que los niños del lugar tuvieran la posibilidad de aprender danzas en un espacio gratuito. Empezaron en una casa sin puertas y ventanas, quince chicos ( entre 3 y 12 años) que junto a las profes, construyen día a día un espacio de arte inclusivo, que además, deleita a toda la comunidad.
Todos los sábados se reunían en una casa para aprender y practicar danzas españolas, hasta que a finales del año 2012 la cantidad de niños se había multiplicado y el espacio para realizar las clases se tornó pequeño. Por lo que, con ayuda de las vecinas y madres de los alumnos de la academia, lograron que la escuela Tomas Silvestre prestara parte de sus instalaciones.
Con el tiempo lograron realizar sus propios trajes y después de muchas clases de ensayo comenzaron a ser invitados a eventos: fiestas de escuelas, cenas shows de uniones vecinales y de clubes deportivos, entre otros.
A principios de 2013 surgieron nuevos proyectos, que terminaron repercutiendo en cambios de traje, nuevos bailes, y más eventos. Hasta que un día decidieron que la academia debía realizar su propio festival de danzas.
En las instalaciones de la escuela Tomas Silvestre, con la ayuda de la gente de Villa Bastias la Academia realizó el primer festival. El show brindado fue aclamado, e integró no solo danzas españolas, sino que participaron bailarines de danzas árabes y folklóricas.
El crecimiento de esta academia fue muy notorio por lo que la misma ha extendido sus clases al centro de Tupungato. Sin dejar de trabajar en el distrito donde nacieron, nuevas expectativas, eventos, sueños y proyectos les aguardan a los integrantes de la Academia tupungatina “Pasión Gitana”.
(Nota: Florencia Luconi, estudiante de Comunicación IESVU 9-015)