El proyecto de ley que grava las acciones de las empresas que no cotizan en bolsa para compensar la recaudación que el Estado dejará de percibir al eximir del pago de Ganancias a más de 1,5 millón de trabajadores y jubilados, será debatido por el Senado.
El Plenario de Labor Parlamentaria determinó que la iniciativa enviada por el Poder Ejecutivo, sea puesta a consideración del pleno en una sesión que comenzará a las 11.
La iniciativa que obtuvo dictamen el jueves pasado propone la eliminación de la exención sobre las acciones de empresas, aunque se estableció que sólo tributarán un 15 por ciento aquellas que no cotizan en bolsa, y el 10 por ciento sobre los dividendos.
Además, se incluye el tributo para empresas extranjeras que realicen entre sí compra y venta de paquetes accionarios de empresas argentinas.
El proyecto apunta a reemplazar parte de los fondos que dejarán de recaudarse al quedar eximidos de Ganancias los salarios brutos de hasta 15.000 pesos -tanto de trabajadores casados como solteros-, medida que comenzó a regir el 1° de este mes.
La medida tiene el respaldo del bloque del Frente para la Victoria, en tanto que la oposición integrada por el radicalismo, el peronismo disidente y el Frente Amplio Progresista decidieron no respaldar la iniciativa, que la semana pasada fue enviada por el Poder Ejecutivo al Congreso y el miércoles 4 por la noche, sancionada en Diputados.
El proyecto fue defendido el jueves 5 en un plenario de las Comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Coparticipación Federal por el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, quien destacó que el proyecto apunta a financiar los cambios instrumentados por el gobierno nacional en Ganancias, que disponen que los trabajadores, tanto casados como solteros, que perciben hasta 15.000 pesos brutos queden exentos de ese tributo.
El jefe de la AFIP explicó ante los senadores que la iniciativa que grava con un 15 por ciento las acciones de empresas que no cotizan en bolsa, y establece un tributo del 10 por ciento sobre los dividendos busca lograr «un nivel de equilibrio».
Etchegaray argumentó que «se optó por gravar la venta de acciones que no cotizan en Bolsa que se estiman puede dar por año entre 650 y 700 millones de pesos con una alícuota del 15 por ciento» y recordó que «antes se hacía compraventa de acciones que al Estado no le dejaban un peso».
El funcionario señaló que se descartó gravar los plazos fijos porque «eso es ahorro argentino» y «es contraproducente», y destacó el hecho de que se «equiparen las empresas nacionales con las de capital extranjero» en el pago de este gravamen.
Al finalizar la presentación de Echegaray, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Aníbal Fernández, criticó a los legisladores de la oposición que se negaron a apoyar el proyecto cuestionando la creación de nuevos impuestos.
“Cualquiera puede decir lo que quiera. Sobre todo cuando se acercan las elecciones y pretenden eliminar impuestos. Pero el que tiene la responsabilidad de gobernar es el que tiene que garantizar el Presupuesto”, sostuvo Fernández.
La crítica del senador bonaerense estuvo dirigida, puntualmente, hacia el radical Ernesto Sanz quien había cuestionado la creación de nuevos impuestos al decir que “cobrarles Ganancias a los trabajadores por su salario es una enorme contradicción, porque el salario no es ganancia”.
Fuente: Télam