Había sido encarcelado el jueves en la Penitenciaría de Tunuyán. Su complicado prontuario lo habría llevado a tomar la determinación.
El pasado jueves por la tarde-noche, personal penitenciario de la unidad 7 de Tunuyán de la seccional carcelaria halló al joven de 25 años colgado del cuello sobre una de las ventanas de la celda que ocupaba. Había sido detenido el jueves por la madruga por un robo a mano armada.
La detención del sujeto se produjo el jueves a la madrugada cuando personal de la UEP lo interceptó minutos después de que había asaltado a dos albañiles en las calles Godoy Cruz y Aristóbulo del Valle del centro tunuyanino. En el procedimiento, el joven arrojó los elementos robados. Aunque se conoce que hubo un coautor del hecho, quedó detenido en la Penitenciaría del departamento a disposición de la justicia.
Según fuentes policiales, la sumatoria de causas habría repercutido y con esta entrada el recluso ya no podría acceder a los beneficios de excarcelaciones (“entradas por salidas”). En este marco, la irreversible condena en el penal sería para la fuerza policial la causa que motivó al detenido a tomar esta determinación.
El cuerpo fue hallado ahorcado con unas costuras reforzadas de las orillas del colchón de la celda que el interno habría quitado. Efectivos de la Policía que se encontraban en el lugar, declararon que el sujeto no había expresado ninguna manifestación de alerta.