El Departamento General de Irrigación firmó un convenio con la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas donde se acordó un plan de regularización del vertido de efluentes industriales. El DGI realizará tareas de capacitación en las bodegas miembros y la ACOVI implementará plantas de tratamiento de efluentes líquidos que den cumplimiento a los límites de vuelco establecidos en las reglamentaciones vigentes.
Tras la firma del convenio, el superintendente General de Irrigación, José Luis Álvarez, destacó que desde Irrigación se realizarán tareas de capacitación en el tratamiento de efluentes para las 30 bodegas que se encuentran nucleadas en ACOVI. “Queremos seguir profundizando esta vinculación que tenemos porque entre Fecovita y ACOVI reúnen a más de 5 mil productores de la provincia y realmente con esa fuerza, en conjunto con nuestras inspecciones de Cauce, podemos lograr tener un uso del agua eficiente, sobre todo en la parte agrícola”, agregó Álvarez.
Por su parte, Eduardo Sancho, presidente de ACOVI destacó: “siempre hemos considerado al agua como una clave para todos nuestros productores, recordemos que las cooperativas vitivinícolas tenemos una dependencia muy fuerte del recurso hídrico. Nuestro compromiso es fortalecer, a través de las cooperativas, el tratamiento de los efluentes para, en el menor plazo posible, cumplir con todas las condiciones que requiere el buen tratamiento del agua”.
A partir de la firma de este convenio, las empresas tendrán un plazo de 180 días para programar un «Plan de Regularización Cooperativa» en el cual se establecerán las actividades, inversiones y los tiempos en los que cada cooperativa se compromete a realizar las acciones necesarias para cumplir el acuerdo.