El mundo financiero vivirá hoy una nueva jornada de expectativa. El Gobierno comenzó el camino para reestructurar la deuda con inversores y el FMI.
Dólar, acciones, bonos, riesgo país. El mundo financiero vivirá hoy una nueva jornada de expectativa –y tensión- luego de que ayer el Gobierno anunció un “reperfilamiento” de la deuda. Es, en criollo, el comienzo de la reestructuración.
Las cuatro medidas que dio a conocer ayer el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, apuntan a descomprimir “una eventual fuente de demanda sobre las reservas” pero además “no pasar el problema al (Gobierno) que sigue”.
Los anuncios llegaron ya con el mercado cerrado, por lo que recién hoy se conocerá su impacto en el sector financiero. Ayer el dólar se disparó por encima de los $60, el riesgo país quedó en más de 2.000 puntos y los bonos se derrumbaron hasta 14%. En cambio, las acciones en el S&P Merval ganaron 3,4%. La otra noticia del día fue que Hacienda declaró desierta la licitación de letras ante la falta de interés.
En conferencia de prensa, Lacunza anunció que buscará postergar el pago de la deuda que el país emitió y que está tanto en manos de inversores privados como con el FMI, para «aliviar la carga financiera en el corto y el mediano plazo».
«Queremos acordar con todas las fuerzas políticas una campana protectora» que no solo brinde certeza al sector financiero, «sino también a toda la población», dijo Lacunza durante una rueda de prensa, en la que estuvo acompañado por su gabinete, y algunos legisladores de Cambiemos.
Destacó que «ningún Gobierno puede solo, menos en época electoral», y anunció cuatro medidas que forman parte de la campana protectora, algunas requieren el aval del Congreso. La primera medida anunciada fue la de extender los plazos de vencimiento de deuda de corto plazo, es decir de las Letras del Tesoro (Letes) y de las Letras de Capitalización (Lecaps), como así también el de las Lecer (Letras atadas al CER) y las Letras atadas al dólar (Lelink) y otras emitidas por el Banco Central para «los tenedores institucionales, quedando exceptuadas las personas, quienes cobrarán en tiempo y forma cada uno de estos vencimientos».
«La medida busca aliviar la carga para el Estado de tener que pagar vencimientos de la deuda que, hasta antes de las PASO, se renovaban en un 88% y luego cayeron al 10%», dijo Lacunza en la conferencia de prensa.
En la jornada, la secretaría de Finanzas debía refinanciar unos u$s2.600 millones de letras en pesos y dólares que vencían hoy, operación que quedó desierta.
Según cálculos, las personas físicas tendrían solo el 15% del total emitido, mientras que el restante 85% está en manos de inversores institucionales.
Hacienda precisó que en cada vencimiento se pagará el 15% a la fecha de vencimiento, un 25% a los tres meses y el 60% a 6 meses y que «cada título devengará su tasa correspondiente hasta la fecha de pago».
Mientras que «en el caso de las Lecap que venzan a partir de 2020, solo se extenderán 3 meses de plazo».
La segunda medida tiene que ver con el envió al Congreso de un proyecto de Ley para promover una extensión de los plazos de deuda en jurisdicción local, sin quita de intereses ni de capital.
El consenso para esa medida «se dará en el Congreso. Todos los integrantes del equipo económico estamos dispuestos a ir a todas las comisiones para explicar los alcances», dijo Lacunza.
La tercera acción ser buscar la extensión voluntaria de los plazos de deuda bajo jurisdicción internacional, sin quita de capital ni de intereses. «Esperamos que los bancos nos hagan llegar sus propuestas», dijo Lacunza.
Para ello buscarán activar la «cláusula de acción colectiva» por la cual se requiere del apoyo de un porcentaje de tenedores de esos títulos que acepten esta propuesta, cantidad que varía según cada emisión.
La cuarta medida comprende una nueva negociación con el Fondo Monetario Internacional de los vencimientos que van desde el 2020 hasta el 2023 inclusive.
«Hemos propuesto a los funcionarios del Fondo (que están en Argentina) iniciar el diálogo, que inexorablemente deberá concluir en el próximo mandato, para reperfilar los vencimientos de deuda», destacó Lacunza.
El ministro explicó también que «esto no quiere decir que se haya caído el actual acuerdo con el Fondo, el cual se ha cumplido con todos sus compromisos», por el que se espera que el organismo desembolse US$ 5.400 millones comprometidos para septiembre.
Explicó que estas medidas «hacen relajar (la presión) que se ejerce sobre las reservas» que llegan a US$ 57.000 millones «el doble de lo que había hace dos años, y que están para ser utilizadas en caso de ser necesario», reiteró Lacunza.
Fuente: ámbito.com