En las redes sociales se acumulan las denuncias de abuso y de acoso contra Rodrigo Eguillor, hijo de una fiscal, luego de que una joven de 22 años asegurara que la forzó a mantener relaciones sexuales privada de su libertad en un departamento de un amigo. Para defenderse, Eguillor grabó un vídeo en el que hace gala de su machismo, de su misoginia y hasta de su xenofobia.
De acuerdo al testimonio de las amigas de la chica y de un vídeo grabado por los vecinos, después del abuso la joven intentó escapar por el balcón, pero Eguillor empezó a “gritar más alto que ella fingiendo que se estaba intentando suicidar”. Una vez que la historia del ataque se hizo pública, muchas chicas reconocieron a Eguillor y comenzaron a contar que ellas también habían sido acosadas por él en el pasado, algunas de ellas menores. Fue entonces cuando el acusado, hijo de la fiscal de Ejecución Penal de Lomas de Zamora Paula Martínez Castro, contraatacó y denunció a todos los que hablaban de él por grooming.
Las amigas de la joven salieron a contar la historia en los últimos días. Según explicaron, lo hicieron después de que el hijo de la fiscal empezara a “difundir esta falsa historia”. De acuerdo a su relato, Eguillor, ex relacionista público del boliche JET, había invitado a cenar a la joven pero a último momento cambió los planes y le pidió que acercara al departamento de un amigo. “Ella fue y nunca más la dejó salir. Le pegó con un adoquín en la cabeza, la violó, la quiso matar y ella saltó por el balcón”, contaron las jóvenes por las redes sociales. Automáticamente se replicaron las denuncias en las redes y circuló un vídeo que muestra el momento exacto en el que el joven la agarra del cuello y la intenta hacer entrar al departamento con violencia.
Posted by Carolina Guadalupe Patanó on Saturday, December 1, 2018
“El intento de suicidio no es real, ella se estaba intentando escapar del lugar porque él no la dejaba salir”, contó Carolina a la señal TN. “En el departamento se empezó a desenvolver toda una situación de violencia y maltrato verbal”, relató y agregó el dato de que “había otro chico adentro” también en un primer momento. “Después se retira, ellos quedan solos y él la empezó a tratar mal, la manoseaba, quería tener relaciones con ella y ella se negaba. consumaron el acto, el ya la había tratado mal verbalmente, entonces en un momento ella se quiso escapar por el balcón porque no la dejaba salir del domicilio”, amplió. Según circuló en ese momento mismo la joven hizo la denuncia, aunque la causa aún está caratulada como “averiguación de delito”.
Una vez que la historia tomó estado público, muchas mujeres empezaron a denunciar que más de una vez Eguillor las había acosado, que les había enviado fotos de sus genitales y que las había insultado luego de que ellas demostraran su falta de interés.
Eguillor redobló la apuesta y denunció por coacción a quienes recopilaron las historias que visibilizaban su forma violenta de relacionarse con las mujeres. Envió esa misma denuncia a quienes compartían las historias e incluso atacó a algunas y violó la privacidad de otras compartiendo sus fotos en las redes sociales. “Qué mal que la vas a pasar” y “vas a terminar en la cárcel”, fueron algunas de las amenazas del joven.
Pero también hizo un vídeo en vivo en Instagram para contestar las acusaciones y reiteró sus amenazas de llevar a la Justicia a quienes lo difamen. Con una actitud altanera y haciendo gala de sus conquistas amorosas sin ningún tipo de respeto por las mujeres en cuestión, destacó: «¿Quieren saber cómo es la historia? Si quieren saber cómo es la historia, posta, posta. Si quieren que les diga la posta, se las cuento. Si no, sigan hablando y díganme ‘violín’ y todo eso. Total, no tienen ninguna prueba. No hay ninguna causa en judiciales. ¿Quieren que les cuente? ¿Quieren que les cuente, o no? Sí, me garcho modelos».
De acuerdo a su versión, él es en realidad “un héroe” porque “salvó” a la chica del suicidio. “La salvé, la saqué del balcón. Si yo no estaba ahí, la mina moría. Es más, si era un tipito de ustedes, las larvas con cero músculo, la piba se moría. La piba iba al gimnasio, tenía buen orto”, dijo. También exhibió su desprecio a la víctima con un comentario racista: «La piba me mintió y me decía que vivía en San Telmo cuando no. Cuando leí la causa vivía en Ituzaingó. Era una negra que me quiere sacar toda la guita». Y cerró: «No necesito violar porque tengo facha».
Fuente nota: Página 12 / Vídeo: Infobae