Se trata de Ariel Ureta, titular de la Comisaría 45ª de Dorrego, quien el lunes fue agredido cuando quiso evitar que golpearan a un joven en la vía pública. Sufrió pérdida de conocimiento, fractura de mandíbula y faltante de piezas dentales.
El comisario Ariel Ureta, titular de la Comisaría 45ª de Dorrego, trató de defender el lunes por la tarde a un joven que era atacado en la vía pública en el oeste de Godoy Cruz. El efectivo vestía de civil, no estaba en funciones, debido a la que la noche anterior había fallecido su madre y se dirigía a despedir sus restos en San Carlos, departamento del cual es oriundo.
Cuando bajó del auto en el que viajaba con su hija de 12 años y el cuñado, lo atacaron brutalmente y perdió el conocimiento. Una piedra impactó en el rostro, contaron los testigos, y también lo agredieron con golpes de puños y puntapiés mientras se encontraba en el piso, tal como informó El Sol.
Fuentes policiales detallaron que un par de sospechosos están tras las rejas por el hecho ocurrido cerca del barrio Urundel, minutos antes de las 15.
Mientras la Justicia intenta determinar cómo sucedieron los hechos, Ureta continuaba este martes internado en la Clínica Francesa. Es que sufrió importantes lesiones en la cabeza cuando perdió el conocimiento: diagnosticaron fractura de mandíbula y heridas en la nariz y los ojos y faltante de piezas dentarias, entre otras heridas.
Las fuentes agregaron que, si bien las daños en su cuerpo fueron de importancia, el jefe policial logrará sobreponerse con el paso de los días. Su cuñado y la hija también fueron agredidos y debiero recibir asistencia médica.
Lo cierto es que Ureta, que simplemente pasaba por el lugar e intentó defender a un joven que era atacado por un grupo de personas en la calle, terminó siendo él la víctima del episodio. Los testigos explicaron que, de no ser por algunos presentes, el ataque que sufrió podría haber de mayor gravedad.
Fuente: El Sol