El anuncio incluyó la rescisión de la concesión de Los Perales-Las Mesetas, la tercera área en importancia que la petrolera de Repsol tenía en el país. En menos de un mes, ya le quitaron el 19 por ciento de su producción nacional de crudo.
El gobierno de Santa Cruz le quitó ayer a YPF la concesión del área Los Perales-Las Mesetas, la más relevante de esa provincia y la tercera en importancia que la petrolera controlada por Repsol tenía en el país. Según datos del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas, YPF concentraba en esa área el 8,3 por ciento de su producción nacional de crudo. Además, el gobernador Daniel Peralta anunció la caducidad de las áreas Pico Truncado-El Cordón y Cañadón Vasco, que en conjunto le restan otro 4,1 por ciento. Hasta el momento, YPF perdió concesiones en seis provincias por el 19 por ciento de su producción nacional, y si finalmente la semana próxima Chubut le quita el yacimiento Manantiales Behr, la cifra se elevará a cerca del 28 por ciento. No es este el único motivo de preocupación del presidente de Repsol, Antonio Brufau, que esta semana llegó a Buenos Aires con el objetivo de discutir con el Gobierno sobre el futuro de la empresa: a la avanzada provincial se le sumó ayer el rumor sobre un inminente anuncio que Cristina Fernández de Kirchner realizaría hoy luego de la audiencia con los gobernadores de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi), lo que hizo caer la acción de la empresa otro 5 por ciento en Wall Street. Sin embargo, por la noche fuentes oficiales bajaron las expectativas y dijeron a este diario que lo único confirmado es la audiencia.
Peralta empezó de menor a mayor. El 14 de marzo declaró la caducidad de dos áreas de YPF que no tenían producción (Los Monos y Cerro Piedras y Cerro Guadal Norte), pero luego dejó en claro que ese era sólo el comienzo y adelantó que estaba evaluando la rescisión de otras áreas relevantes desde el punto de vista productivo, entre las que se encontraba Los Perales-Las Mesetas. La semana pasada aseguró que la reversión ya era prácticamente un hecho, pero esperó a que YPF hiciera su descargo antes de oficializar la quita.
La petrolera le presentó ayer cerca de las 16 horas a Santa Cruz un programa para los próximos cinco años que suponía una inversión de 4379 millones de dólares, de los cuales 1438 serían invertidos en Los Perales-Las Mesetas. Fuentes de la empresa informaron que la propuesta suponía una mejora significativa respecto de los planes previos, sobre todo en el área Los Perales, pero sin detallar cuál es el incremento de inversión previsto en términos porcentuales.
Peralta consideró insuficiente la oferta y dos horas después firmó el decreto que declaró la caducidad de las áreas y lo giró a la Cámara de Diputados provincial para su ratificación. “Me avergüenza que se nos quiera tomar el pelo de esta manera”, aseguró el mandatario en respuesta a la presentación de YPF. En el decreto, al que accedió Página/12, dice que el descargo de la empresa “resulta a todas luces inconducente a fin de subsanar las trasgresiones perpetradas, ya que no logra ampliar el horizonte de reservas y producción tras tantos años de desinversión”. De este modo, la filial de Repsol pierde un yacimiento estratégico, el más importante desde que las provincias iniciaron las quitas, justo cuando su presidente, el catalán Antonio Brufau, está de visita en el país para tratar de negociar una salida al conflicto.
En los considerandos del decreto, se analiza la performance de YPF en las tres áreas durante el período 2006-2011 con el objetivo de justificar las rescisiones. Al hacer referencia a la concesión Cañadón Vasco, se destaca que el nivel de actividad no fue acorde con el potencial del área porque sólo se destinó allí el 3,1 por ciento de los 1609 millones de dólares que YPF invirtió en la provincia durante ese período. Se reconoce que en los dos últimos años se produjo una reactivación de esos campos, pero se afirma que no fue suficiente para compensar la inacción previa. Incluso se remarca que la empresa sólo se concentró en la explotación de pozos porque las actividades de exploración fueron nulas.
Cuando analiza la concesión de Pico Truncado-El Cordón denuncia un declive de la producción y las reservas entre 2006 y 2008 y una estabilización en los años posteriores. Al explicar los motivas del pobre desempeño de la zona se pone el foco en que sólo se invirtió allí el 0,26 por ciento de lo desembolsado por YPF entre 2006 y 2011.
Por último, en lo referente a la concesión Los Perales-Las Mesetas, el decreto no menciona qué porcentaje de la inversión total de YPF en la provincia fue a parar a esa área (lo que hace suponer que fue un porcentaje significativo), pero destaca que “la inversión realizada no guarda relación con la magnitud de las reservas comprobadas”. Además, especifica que las inversiones vienen cayendo desde el 2008 y aclara que sólo se destinaron al yacimiento Los Perales, pese a que el área incluye también los yacimientos Cerro Bayo, La Cueva y Las Mesetas, donde la inversión fue nula.
Con el anuncio de Santa Cruz, la situación de YPF es cada vez más complicada. En menos de un mes, YPF perdió el 19 por ciento de su producción de crudo y el conflicto todavía está abierto. Hoy por la tarde los gobernadores de la Ofephi se reunirán para evaluar cómo seguir y luego los recibirá la Presidenta. El gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, afirmó el miércoles que Cristina Fernández de Kirchner podría anunciar la decisión oficial de tomar el control de la compañía. En el Gobierno no muestran las cartas, pero fuentes oficiales dieron a entender anoche que hoy no será el Día D.
Fuente: Página 12