Las autoridades confirmaron que fue un atentado similar a los de Londres, Berlín y Niza. Europa en alerta.
Al menos tres personas han muerto y ocho han resultado heridas como consecuencia de un atropello supuestamente intencionado en una calle comercial del centro de Estocolmo, según un balance preliminar confirmado por la Policía.
«Suecia ha sido atacada», ha proclamado el primer ministro, Stefan Lofven.
El ataque ocurrió poco antes de las 13H00 GMT cerca de unos grandes almacenes, en el cruce entre una de las calles peatonales más frecuentadas de la capital, Drottningsgatan, y una de las principales arterias de la ciudad, Klarabergsgatan.
Una nube de humo ennegrecía el cielo en el lugar de los hechos, acordonado por la policía, según las imágenes de las televisiones. Varios helicópteros sobrevolaban el centro de la ciudad.
El autor del atentado había robado el camión aprovechando «una entrega en un restaurante», declaró una portavoz de la empresa de transportes Spendrups, Rose-Marie Hertzman.
El atentado se produjo cerca de la estación de metro T-Centralen, por donde pasan todas las líneas de Estocolmo
Los hechos recuerdan los ataques perpetrados en Londres, Berlín y en Niza, en el sur de Francia, cuyos autores embistieron a una multitud con vehículos.
El 22 de marzo, Khalid Masood, un británico de 52 años convertido al islam y conocido por los servicios de seguridad, mató a cinco personas atropellándolas con un coche sobre la acera del puente de Westminster, que atraviesa el Támesis frente al Big Ben, antes de apuñalar a muerte a un policía delante del parlamento.
El autor del ataque, reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), fue abatido por la policía.
En diciembre, 12 personas murieron después de que un hombre utilizara un camión robado para lanzarse contra la gente que paseaba por un mercado de Navidad en Berlín.
El ataque más mortífero de este tipo en los últimos meses fue el del 14 de julio de 2016, en Niza, cuando una persona atropelló a una multitud que asistía a los fuegos artificiales con motivo de la fiesta nacional francesa. El atentado, reivindicado una vez más por el EI, causó 86 muertos.
Fuentes: Europa Press; Los Andes