El 7 de febrero de 2016 el padre de Natasha encontró a la niña muerta en su casa. La chica había sido vejada y violada por un femicida reincidente que estaba en libertad, y que trabajaba en una obra frente a su casa.
Natasha tenía 13 años, iniciaba su vida, y su asesino, a pesar de que había violado y muerto a otra nena como ella, Verónica Escudero, se encontraba en libertad. Ese fin de semana, Natasha se quedó sola en su casa, ya que sus padres estaban separados, y su madre había viajado. El domingo, el padre fue a ver cómo estaba, y se encontró con una escena desgarradora: su hija estaba muerta, después la autopsia determinó que la niña había fallecido por aspirar su propio vómito, tras las vejaciones a las que fue sometida. Las primeras informaciones volvieron a revictimizar a la nena, describiendo la escena donde fue hallada, y además, suponiendo que la chica había estado en una “fiesta sexual”. Sin embargo, en los días siguientes se determinó que Natasha había sido abusada por el mismo femicida que, años atrás, mató a otra nena de 10 años: Verónica Escudero, quien apareció muerta en el río Tunuyán.
Mauro Escudero trabajaba en una obra frente a la casa de Natasha, y el fin de semana aprovechando que la niña estaba sola, cometió el aberrante hecho. Luego, después de intentar fugarse, sería detenido, acusado, junto a otro hombre, de ser el autor del femicidio.
Natasha Prieto se sumó a la lista de mujeres muertas por la violencia machista, junto a Verónica Escudero. Hace un par de meses, Alejandra Janko, en San Carlos, también fue muerta por su marido. En Tunuyán, también se investiga la muerte de una joven, ocurrida el 1 de enero: aunque en un primer momento se dijo que se trataba de un suicidio, su pareja fue detenido por ser sospechoso de tener responsabilidad en la muerte de la chica, también menor de edad. El juez que intervino lo dejó en libertad, por considerar que no habían elementos suficientes para imputarlo, pero la madre de la joven se ha convertido en querellante, pidiendo que se investigue la muerte de su hija.
En 2017, más de un femicidio por día
Ya se cuentan 57 asesinatos de mujeres en 43 días en todo el país. Un flagelo social que, a pesar de las campañas, sigue mostrando un crecimiento sostenido.
Un total de 57 femicidios se cometieron en los primeros 43 días en la Argentina, según lo reveló un informe elaborado por el Instituto de Políticas de Género «Wanda Taddei», que hizo foco que a los ataques contra mujeres ahora se suman las agresiones a integrantes de su entorno familiar, social y afectivo.
El abogado Julio Torrada, titular de la organización, expresó que «las cifras horribles en cantidad de femicidios son una expresión de un crecimiento preocupante de este flagelo social que tenemos en Argentina, y que debemos erradicar con el esfuerzo, el compromiso y políticas públicas que realmente protejan a las víctimas».
En diciembre, el Instituto Wanda Taddei (la mujer asesinada con fuego por su pareja, el músico», Eduardo Vázquez), realizó un informe donde alertaba que «a pesar de las marchas contra la violencia de género que se hicieron en 2016, en los últimos cien días del año se habían registrado 133 crímenes sufridos por mujeres en un contexto machista.
En el informe de los primeros 43 días del año, consignando los 31 de enero y 12 de febrero, la organización civil lleva registrados 57 casos de mujeres asesinadas en femicidios.
«Hablamos de crímenes cometidos por varones que tienen un sentido de pertenencia de las mujeres, como si fueran objetos de su propiedad. En el último tiempo, observamos que los femicidas están agrediendo también a sus seres queridos, a personas de su entorno familiar, social o sentimental. Es decir, los femicidas van por todo para destruir completamente a la mujer que cree suya. Esto es lo que tenemos que detener. No se puede seguir soportando tanta violencia y muerte», dijo Torrada en declaraciones a Diario Popular.