A cuatro años del primer encuentro internacional, se replicaron marchas y manifestaciones a lo largo y ancho del país.
El femicidio de Chiara Pérez de 14 años ocurrido en Santa Fe el 10 de mayo dio inicio al movimiento de Ni una menos que se manifestó el 3 de junio de ese año junto a un país que por primera vez en su historia se alzaba masivamente para pedir que dejen de morir mujeres en manos de la violencia machista.
En este cuarto aniversario, vecinos y organizaciones feministas del Valle de Uco se manifestaron en la plaza de Tunuyán en un encuentro donde, al contrario de otras ciudades, no hubo marcha sino que tuvo como protagonistas a las intervenciones artísticas como modo de protesta.
El reclamo giró en torno a la violencia de género en todo en país, a los feminicios y transfemicidios, y al pedido de la aprobación del proyecto de ley del aborto legal, seguro y gratuito, presentado el pasado 28 de mayo en el Congreso, fecha en que también hubo movilizaciones en todo el país y en la región.
«Buscamos que la mujer deje de ser revictimizada y para eso es necesario que todos los profesionales estén formados en perspectiva de género tanto los jueces, fiscales como médicos, trabajadores sociales, psicólogos» expresó en comunicación con El Cuco Digital, Lorena Vega, representante del Movimiento Feminista del Valle de Uco.
«Entendemos que queda mucho por hacer. Si bien en Tunuyán existe un refugio para mujeres víctimas de violencia de género, el hospedaje es por pocas horas por lo que la mujer tiene que volver a su hogar. La mayoría de aquellas que están vulneradas económicamente no tienen a dónde ir. Entonces vuelven a hogar donde vuelven a ser violentadas constantemente».
«Como movimiento, más allá del acompañamiento a la víctima, buscamos la educación y la prevención a través de charlas. La idea ahora es poder llegar a los barrios para empoderar a la mujer y que conozca realmente cuáles son los derechos que tiene a la hora de ir a hacer una denuncia» explicó.
De acuerdo a cifras oficiales, en 2018 fueron 278 las mujeres asesinadas lo que representa un incremento del 10,7% respecto a 2017. En lo que va de 2019, ya hubo 76 víctimas fatales de la violencia de género.