La medición interanual marcó una caída en las ventas del 17%, se indica que frente al aumento de la pobreza las personas eligen comer y pagar tarifas a comprar medicamentos. Los jubilados y pensionados en el centro de la tormenta ya que ante la reducción por parte de PAMI de la entrega de medicamentos gratuitos, deben afrontar con su bolsillo el costo de los mismos, incluso teniendo que elegir entre medicamentos.
Las políticas económicas impulsadas por el gobierno de Javier Milei se tradujeron en una masiva caída del consumo, con un desplome del 17,4% interanual en agosto en la cantidad de ventas en las farmacias, según dio a conocer la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) a través de un informe. Por su parte, el sector farmacéutico advirtió por las dificultades que enfrentan los jubilados para comprar medicamentos trascendentales.
El veto total a la reforma jubilatoria que aprobó el Congreso, los recortes en la cobertura de medicamentos para jubilados dispuestos por el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) y las medidas de ajuste del Gobierno generó que sea una tarea casi imposible para los jubilados comprar los remedios, en el marco del bajo nivel del haber mínimo, que desde octubre será de $244.320,56, mientras que se continuará con el pago del bono de $70 mil.
A esto se suma, el dato que se conoció la semana pasada: la pobreza se incrementó al 52,9% durante el primer semestre de la administración de La Libertad Avanza, según dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). “La gente está eligiendo comer o pagar las tarifas por sobre comprar medicamentos. Prioriza otros gastos”, resumió el director del Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos, Rubén Sajem, a C5N
Además, incorporó otra estadística que advirtió la caída en la cantidad de fármacos vendidos: “Nosotros medimos los medicamentos y discriminamos venta libre y recetados. En unidades, midiendo agosto de 2024 con el mismo mes del año pasado, tenemos una baja de un 15% que implica que hubo 61 millones de unidades por mes en agosto de 2023 y se pasó a 51.850.000 en agosto de 2024. Hay una diferencia de cerca de 9 millones de unidades, de las cuales el 70% son medicamentos recetados y el resto de venta libre”.
“Los medicamentos siguen aumentando al ritmo de la inflación, a lo que ya habían acumulado en los últimos meses de 2023. Desde noviembre de 2023 hasta ahora, subieron un 67% por encima de la inflación y eso es muchísimo”, advirtió sobre los últimos incrementos.
Por su parte, la secretaria general de la Confederación Farmacéutica Argentina, Claudia Martino, marcó a este medio la delicada situación de las farmacias: “No escapamos a la recesión en todo el país. Es terrible lo que bajaron las ventas en los de venta libre. Hay muchas farmacias en un momento complicado, todavía no vemos que hayan cerrado pero sí que se están resintiendo los stocks, por eso a veces cuando uno va a una farmacia generalmente encuentra todas las drogas pero no todas las marcas”.
En tanto, Sajem recordó un convenio entre PAMI y los laboratorios, que se llevó a cabo durante la gestión presidencial de Mauricio Macri y se profundizó en el mandato de Alberto Fernández: “En 2018, los laboratorios hicieron un 5% de descuento a PAMI por debajo del precio al público real. Entonces, el medicamento en el precio de venta por PAMI tenía un 5% de precio menor al que pagaba el público en general. En la gestión de Fernández se llegó al 40% de diferencia. Este acuerdo les servía a todos: los laboratorios cobraban menos los medicamentos pero vendían más, PAMI pagaba menos y los jubilados tenían los medicamentos porque se los llevaban gratuitos”.
No obstante, denunció que el gobierno de Milei dio marcha atrás con el convenio, lo que conlleva a que los jubilados deban abonar una mayor cantidad de dinero para comprar medicamentos. “Desde marzo, se les permitió a los laboratorios revertir todo ese descuento que se venía haciendo. Desde ese mes hasta ahora, mes a mes, les dejó aumentar un 4% por sobre la inflación. Hoy, los jubilados pagan un 26% por sobre la inflación en los medicamentos”, marcó.
También, señaló las complicaciones de la obra social para abonar a establecimientos farmacéuticos: “No sólo los jubilados están pagando el 26% más en lo que les toca pagar, que cada vez es más porque les sacan la cobertura, sino que PAMI también tiene que abonar más a las farmacias y no lo está pudiendo hacer. Si debe un mes de prestación, ya las farmacias no pueden entregar los medicamentos. La gestión en medicamentos es muy mala, no hay una política sobre eso. Es lógico que haya bajado el uso de los fármacos, no podía pasar otra cosa”.
Los recortes de PAMI en la cobertura de medicamentos para jubilados
El director ejecutivo de PAMI, Esteban Leguizamo, reconoció los recortes en la cobertura de medicamentos para jubilados. “No escapamos a la realidad”, argumentó en una entrevista radial, en medio del ajuste de la administración de La Libertad Avanza sobre las jubilaciones.
En esta línea, Sajem detalló los fármacos que cuentan con los precios más altos: “Hay 2.400 presentaciones que PAMI dio de baja la gratuidad. PAMI representa el 40% de la venta de medicamentos en Argentina. Hay medicamentos muy caros, como la aspirina o los antibióticos. El cilostazol, que sirve para mejorar la circulación en las piernas, vale $80 mil. La pregabalina, que sirve para dolores neuropáticos, cuesta $30 mil. La morfina vale entre $80 mil y $120 mil. También bajaron las ventas en medicaciones contra la presión o para controlar el colesterol”.
En tanto, fuentes de PAMI respondieron a este medio si se evalúa ampliar la cobertura de medicamentos, luego de los recortes y en el marco de la crisis económica: “La nueva gestión de PAMI siempre tuvo como prioridad la inversión en las patologías más severas jerarquizando la cobertura de medicamentos crónicos y/o oncológicos por sobre aquellos que son para tratamientos leves”.
“Esta nueva lógica prioriza estos tratamientos que en promedio tienen un costo 35 veces más elevado que las patologías a las que PAMI les readecuó la cobertura. El instituto se encuentra en negociaciones abiertas para incorporar nuevas moléculas al vademécum para el tratamiento de estas enfermedades”, agregaron.
También, recordaron las gestiones que los sectores más expuestos pueden llevar adelante: “No se va a dejar a ningún afiliado sin cobertura en sus medicamentos. Aquellos afiliados que se encuentren en una situación de vulnerabilidad económica, pueden realizar el trámite de subsidio social que les permite acceder a cuatro moléculas con 100% de cobertura sin tener que realizar los copagos correspondientes”.
En tal sentido, las fuentes señalaron que “incluso, si alguno de los medicamentos los necesita por su patología, PAMI también cuenta con una vía de excepción para que no tengan que abonar el medicamento necesario”.
La millonaria deuda de PAMI con las farmacias y el impacto en los afiliados
El sector farmacéutico advirtió que PAMI les debe alrededor de $12 mil millones, lo que pone en jaque el funcionamiento normal de las farmacias e incluso podría impactar en las ventas de medicamentos a los afiliados.
Fuentes de la obra social reconocieron la deuda en diálogo con este medio y aseguraron que comenzó a saldarse: “Las autoridades de PAMI tienen un diálogo fluido con representantes de las farmacias para encontrar una pronta solución a esta situación. Hace tres semanas se realizó un pago. La deuda está en tiempos acordes de pago”.
En este marco, Sajem alertó por las dificultades de las obras sociales para adquirir medicamentos: “La situación entre PAMI y las farmacias la veníamos anunciando desde diciembre. Si aumenta el precio de los medicamentos, las obras sociales no podrán pagarlas. PAMI tiene que pagar más caro los medicamentos porque los laboratorios empezaron a aumentar”.
“Estas son políticas que tienen una consecuencia anunciada. Habrá farmacias que no podrán trabajar con PAMI. Se está haciendo mucho daño”, aseveró el director del Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos.
Los medicamentos fuera de las farmacias, un factor clave en la caída de ventas
El mega decreto de necesidad y urgencia (DNU) que firmó Milei en diciembre habilitaba a que también se vendieran medicamentos sin receta fuera de las farmacias y el expendio de fármacos sin la evaluación de profesionales matriculados. En junio, un juzgado Federal de Mendoza dejó sin efecto esos artículos en toda la Argentina tras un reclamo del Colegio de Farmacéuticos mendocino.
No obstante, y a pesar de que remarcó que el fallo continúa vigente, Martino advirtió que “la gente sigue comprando en lugares no autorizados”.
En esta línea, la secretaria general de la Confederación Farmacéutica Argentina cuestionó la venta de fármacos en otros establecimientos: “Nosotros no sólo advertimos los problemas económicos que esto genera, sino también lo sanitario. Vemos un peligro en que esas drogas la pongan en venta libre y que se pueda encontrar en kioscos y otros lugares donde no haya asesoramiento e indicaciones porque no es que se tiene que tomar, sino que se tiene que tomar con recaudos y con un buen uso”.
También, expuso las medidas que se deben tomar. “Lo que hay que hacer es que los medicamentos estén bajo la órbita de algún profesional, porque si uno habla de venta libre no significa que sea de venta consumo, siempre tiene que estar bajo recomendación. Los medicamentos son residuos peligrosos cuando se vencen y en las farmacias tenemos mecanismos para desechar los que son en desusos, no así los otros lugares”, expresó.
Por su parte, Sajem recordó que la venta libre de medicamentos fuera de las farmacias fracasó en otros periodos en la Argentina: “Es una política equivocada, que ya se probó en la época de (Domingo) Cavallo. Se vendía cualquier cosa y sin control. Había medicamentos vencidos y robados, era un desastre. Fue una experiencia muy negativa. Estos fármacos se venden mucho más caros porque entran tercerizaciones en la distribución. Además, es mucho más seguro porque salen de los laboratorios, pasan por las droguerías y van a la farmacias. Es un circuito transparente”.
En tanto, cargó contra otros puntos del mega DNU que firmó Milei. “Se pretende que las farmacias funcione sin farmacéuticos, como pasa en los países que tienen las peores farmacias de Latinoamérica. Además, con respecto a la liberación absoluta de precios de medicamentos, las reglas del mercado no hacen bajar los precios porque es un bien atípico. La gente no conoce lo que está comprando y muchas veces no tiene opción de sustituir lo que el médico le recetó”, enfatizó.
Fuente: C5N