En reunión con autoridades del Ministerio de Producción del Gobierno de Mendoza, representantes de los sectores agrícolas de la región, pusieron en valor el trabajo llevado adelante para generar reformas en las asistencias que el Estado provincial brinda al sector.
Si bien el Valle de Uco, por características geográficas, no cuenta con la operación de aviones para la lucha antigranizo, ya que la misma se realiza con generadores de superficie, desde La Cámara de Comercio, Agricultura y Turismo de Tunuyán, sumaron propuestas a las acciones del gobierno provincial para modificar el uso de recursos en la asistencia a productores. Cabe señalar que esta región es la zona con más superficie productiva cubierta con malla antigranizo, alcanzando un 32% en vid según indicaron desde la entidad, destacando que ésta es una situación actual para fortalecer y llevar como modelo a otros oasis productivos.
“Hemos reunido información de distintos sectores, desde profesionales que trabajaron en el inicio de la implementación del sistema de lucha antigranizo, hasta información actualizada de Contingencias Climáticas. Hemos trabajado en conjunto con los productores asociados a esta entidad, y sabemos que es necesario mejorar considerablemente las herramientas actuales y rever otras. Por ello hemos realizado un trabajo muy consciente, finalizando en una propuesta con varios ejes, la cual hemos presentado al gobierno provincial”, informó Juan Roth presidente de la cámara de Comercio, Industria, Agricultura y Turismo (CIAT) de Tunuyán.
“Estos últimos días hemos estado trabajando y reunidos posteriormente con el Ministerio de Producción de la provincia de Mendoza, donde claramente hemos manifestado cuál es nuestra posición respecto a las reformas, y hemos dado alternativas, propuestas de mejora, respecto al sistema de mitigación de granizo actual”, explicó Carlos Dávila productor del Valle de Uco y vicepresidente de CIAT. “Fundamentalmente hemos pedido una mejora en el seguro agrícola: hoy tenemos un 10 % de adhesión al seguro, porque es una herramienta que ha quedado muy desactualizada. Por ello proponemos poder tener acceso a una herramienta que cubra el 100% de los costos de producción, que realmente le sirva al productor y sirva al sistema para que se adhieran más productores”.
Otra de las medidas que los productores propusieron fue en relación a la colocación de malla antigranizo. “Sobre esto queremos hacer foco en el pequeño productor, en el más chico, de hasta 10 hectáreas” expresó Dávila, y explicó que la propuesta consiste en: “lograr que este pequeño productor pueda acceder a recursos para colocar la malla antigranizo, y que a través de una fianza personal o por parte del municipio a través de las regalías, puedan estos pequeños productores acceder a financiación de los organismos que tenemos. Nosotros entendemos que la solución definitiva contra el granizo es la colocación de malla, por eso estamos pidiendo una política agresiva para promover esta herramienta. Y para la horticultura, el seguro agrícola, garantizándole al productor recursos para poder producir al año siguiente”.
Y en el caso de los actuales generadores de superficie, los productores pidieron más información de su estado actual y de los costos operativos, con la propuesta de una posible operación desde el sector privado en caso de ser viable tras la información analizada.
Sumando a las propuestas, desde la entidad explicaron que, “en el caso de la malla antigranizo, actualmente del total de la producción del Valle de Uco el 15% está cubierto con malla, y en el caso de la vitivinicultura, de las 28 mil hectáreas que hay en la región, hay 9 mil bajo malla antigranizo, casi un 32%. Entonces, nosotros decimos que con una buena política, o subsidios de tasas contemplando a aquel productor de menos de 10 hectáreas que no aplica a las condiciones que se piden, en un corto plazo podemos cubrir con malla una gran parte de la superficie productiva de cada productor, que le sirva para proteger los costos de producción, y luego seguir avanzando”, referenció Dávila.
Desde la entidad pusieron en valor el trabajo conjunto entre entidades productivas y el gobierno, y manifestaron que la reestructuración que se plantea es una oportunidad para proponerle al sector privado mejorar las herramientas, “en donde sea el mismo sector privado que lleve adelante las operaciones, e imitar lo que sirve y es ejemplo, tal es el caso del sistema de Tomate2000, en el caso del seguro agrícola”.
