La capital de Japón, fue quien organizó los primeros juegos de la historia en Asia. Los nipones organizaron estos juegos a la perfección y sin lugar a dudas fueron los mejores hasta esta parte de la historia. Fue la combinación perfecta entre organización y lujo, ya que los asiáticos no escatimaron en gastos.
El encargado de encender la llama olímpica de estos juegos, fue shinori Sakai, un joven de 19 años de edad, que nació en Hiroshima, el 6 de agosto de 1945, el mismo día en el que en esa ciudad cayó una bomba atómica.
En estos juegos debutaron los deportes de judo y vóley, dos deportes que a futuro serán protagonistas deportistas argentinos, que obtendrán medallas.
Uno de los deportistas que se volvió a destacar fue Abebe Bikila, el atleta de Etiopía, que venía de ganar la maratón en Roma, corriendo descalzo, volvió a quedarse con la de oro, aunque esta vez lo hizo calzado. Lo destacado de esta victoria, fue que 15 días antes de la competencia fue operado de una apendicitis. Lo hizo en un tiempo de 2 horas, 12 minutos y 11 segundos, logrando un récord mundial.
Otro de los que se destacó fue el nadador de Estados Unidos, Donald Arthur “Don” Schollander, quien ganó cuatro medallas de oro en los 100, 400 metros libres y las postas 4X100 y la 4X200, logrando récord olímpico y mundial.
Lo curioso de estos juegos fue la participación de las hermanas rusas Irina y Tamara Press, la primera ganó el oro en pentatlón y la segunda en lanzamiento de bala. Ambas habían ganado el oro en el juego anterior.
Ambas deportistas tenían apariencia hombres, por lo que muchas deportistas y jueces de competencias comenzaron a desconfiar, pero al no haber control de sexos para las competencias, nunca pudieron probar dichas acusaciones.
Lo llamativo fue lo que sucedió en los juegos de México 1968, donde el Comité Olímpico, implemento el test de verificación de sexo para competencias masculinas y femeninas. Ante esto, las hermanas se retiraron de la competencia y de la actividad deportiva sin dan ninguna explicación válida.
Otro de los escándalos de Tokio 1964, fue la que protagonizaron dos boxeadores, Vicente Lorén de España y el argentino José Chirino de la categoría Semipesado. Ambos en sus respectivos combates, no estuvieron conformes con los fallos del árbitro y los terminaron golpeando.
El español lo golpeo gravemente al árbitro y fue suspendido de por vida de la actividad, mientras que el argentino recibió un castigo de tres años de suspensión.
Respecto a la delegación Argentina, llegó a Tokio con 118 atletas y solo se logró conseguir una medalla, fue de plata en equitación. Dentro de la delegación hubo dos mendocinos, Juan Aguilar y Francisco “Paco” Bermúdez, ambos boxeadores.
Quien conquistó la medalla fue Carlos Moratorio con su caballo “chalan”, quien se quedó con la pereceada de plata.
El medallero quedó con Estados Unidos primero con 36 oros, 26 platas y 28 bronces (90), segundo Unión Soviética con 30 oros, 31 platas y 25 bronces (86) y tercero Japón con 16 oros, 5 platas y 8 bronces (29). Argentina terminó puesto 31 con 1 medalla de plata.